Madrugada del 24 de junio , 3 y 59 me levanto de sobresalto por una ráfaga de petardos y un ruido ensordecedor , 2 de mis 3 perritos en un rincón de la sala temblando , esto te rompe en mil pedazos y piensas en las familias que lo deben estar pasando igual , de eso se trata la empatía.
Se dice que es la noche más corta del año, en teoría, pero seguramente es la noche más larga especialmente para nuestra gente grande con enfermedades crónicas, niños muy pequeños, personas con autismo, pacientes con problemas psicológicos y nuestras mascotas que tienen que soportar todo lo que conlleva la pirotecnia de la Noche de San Juan, nuestros seres queridos tienen que lidiar con el miedo a la pirotecnia.
Se ha comprobado los efectos negativos que pueden provocar provocan estos artefactos, que en ocasiones, derivan en problemas de salud, ruidos que aturden , vibración de alto nivel , alteración del humor , acentuación de los síntomas pacientes con migraña, alteración del ánimo de pacientes con autismo sobre todo nuestros pequeños.
Por eso es tan importante concienciar sobre los efectos de la pirotecnia, para que más personas entiendan que cada petardo que tiran hace daño, afecta muy negativamente a otros en su entorno (no solo a los animales, también a personas con vulnerabilidad .
Es importante que los ayuntamientos se involucren en este tema tan importante .
Ya existen ordenanzas que recogen esta cuestión en la gran mayoría de municipios y es importante actualizarnos, recurrir a las asociaciones de vecinos, a los ciudadanos y dar charlas educativas para concienciar sobre esta situación que nos puede afectar a todos.
Tenemos que unirnos !!! como ejemplo los ciudadanos de Terrasa lo están demostrando con su campaña " TERRASA LIBRE DE PIROTECNIA " y también podemos tomar referencia de ayuntamientos como Vitoria, algunas zonas de isona o Girona , o como Torremolinos que emiten bandos en fechas concretas para regular el uso de petardos.
La idea es sencilla procurar que se estudien leyes y modificarlas por el bien de nuestra comunidad.
Por un Sant Andreu libre de ruidos
Felipe